y es totalmente natural, sin ningún tipo de quimico ni conservante, lo cual nos deja super tranquilos ya que si se llevan algo a la boca mientras pintan con sus manitos, no habrá mayores problemas (CON ESTO NO QUIERO DECIR QUE SEA UNA RECETA PARA COMER, sino que si el niño la ingiere no habrá inconvenientes).
La receta original viene del blog Easie Peasie que además tiene muchisimas ideas para compartir con los enanos, si bien está en inglés tiene también muchas fotos para guiarse.
Ingredientes
3 cucharadas grandes de azucar
1/2 cucharadita de sal
1/2 taza (de té) de almidón de maiz (Mejor conocido como Maizena)
2 tazas (de té) de agua
Preparación
Mezclar todos los ingredientes en una cacerolita y llevar a fuego hasta que la mezcla se espese. Enfriar, separar en contenedores y colorear con colorantes comestibles.
Si queremos la pintura mas liquida le agregamos agua de a chorritos, si en cambio la queremos mas espesa, le agregamos un poco de almidón.
Yo elegí hacer los colores primarios, que estoy intentando enseñarle a Tomás. |
Tomás, muy concentrado con su "trabajo". |
Guillermina, que tiene 7 meses, también disfruto muchisimo de las pinturas, aunque de una manera un poco "diferente".
Además de las pinturas, puse otros recipientes con copos de avena, arroz y polenta, convitirtiendo todo en una actividad sensorial. Una vez que puse los recipientes, él tocaba el contenido de cada uno y me describia "suave", "duro", "aspero", lo cual es una excelente manera de estimular el aprendizaje de los adjetivos.
Espero que se animen a probarlo, finalmente la limpieza no es tan dificil y al final del día tendrán un montón de obras de artes de las que su pequeño estará muy orgulloso.
Victoria.